- Segundo milagro japonés -

 

Un gran desarrollo industrial.

A pesar de poseer Japón condiciones favorables poco propicias para lograr superar las heridas de la guerra, existen diversos factores que permiten explicar su gran crecimiento económico a partir de la década del cincuenta.

Factores que se destacan:

1-      La eficacia de las estructuras industriales.

   Su característica central es la coexistencia de compañías gigantes junto a pequeñísimas empresas de difícil subsistencia.

2-      El control de los niveles salariales.

   Se ve favorecido por la ausencia de sindicatos y una escasa cobertura social.

3-      Una profunda reforma en el sector agrícola.

4-      El comienzo de la intervención del Estado.

5-      Los grades avances en el sector científico-técnico.

                                

6-      La incidencia de las exportaciones.

   Se invierte capitales en el este de Asia, EUA y Europa.

7-      El impulso demográfico.

   El aumento de la población y la elevación del nivel de vida provocan un crecimiento del consumo interno.

8-      El traslado al mundo laboral de dos valores tradicionales de la sociedad japonés: la disciplina y el respeto a la jerarquía.

9-      Principalmente se  destacan las características del pueblo japonés.

    El empresario busca el prestigio y progreso de su compañía y el pueblo contribuye a ello intentando presentar un comportamiento de tipo colectivista.

     El trabajador comienza a ahorrar alrededor del 20% de sus ingresos ya que no existe jubilación.

10-  La ayuda estadounidense.

  Se aplican medidas como la condonación deudal, el trato preferencial y las inversiones directas de capital.

Kaizen: modelo de gestión empresarial de Japón. 

Surge  en Japón luego de la segunda posguerra como resultado de su necesidad de superarse frente a la competencia de las industrias occidentales.

Es un sistema enfocado en la mejora continua de toda la empresa y sus componentes. Su preocupación principal es lograr los mejores niveles en materia de calidad, costos y entrega.

En sus relaciones con el entorno, las transformaciones son indispensables: los consumidores pasan a ser la preocupación central y el motivo de desvelo de la empresa. El cliente demanda y cada trabajador es, de algún modo, un cliente.

Un claro ejemplo de Kaizen es el sistema de producción de la empresa Toyota. Pasa de producir 1,5 automóviles por empleado por año en 1958, a producir 23 en 1965 y 39 vehículos en 1969.

 

El modelo Toyota.

Emerge un nuevo modelo de empresa y su éxito competitivo internacional motiva la admiración, primero, y el estudio y la imitación, después, en el mundo occidental.

El llamado modelo Toyota constituye un conjunto de innovaciones en la organización.

Las características esenciales son:

•         La eliminación de los recursos redundantes o “fábrica mínima”.

•         La implantación de la producción ligera.

•         La “dirección del ojo” para deshacerse de todo lo superfluo, es    necesario una organización de la producción que permita sacar todo aquello de lo que se puede aligerar a la fabrica.

•         El método “justo a tiempo”.

•         La autoactivación, consistiendo en que la gestión de la calidad pasa a ser tarea de cada puesto de trabajo.

          

El desarrollo del modelo exigió determinadas condiciones:

a)      El sistema de empleo y la consecuente implicación de los trabajadores asalariados.

b)      El sistema de subcontratismo.